Los propietarios de esta casa de 244 m2 —una pareja con dos hijos pequeños—, decidieron contratar una reforma para concebir el hogar de sus sueños: una vivienda con espacios amplios y abiertos donde pudieran recibir a sus amigos, con mucho almacenaje, una gran habitación infantil, un dormitorio de invitados y toques de color azul en la decoración.
“La amplia superficie de la propiedad facilitó en gran medida el proyecto de reforma e interiorismo”.
Cuenta con un recibidor principal y una entrada para el servicio. Desde esta última se puede recorrer toda la casa, ya que la puerta de servicio accede a la sala de lavandería, que a su vez conduce a un hall interior donde se situó la home office.
“Una de las claves del proyecto consistió en integrar el salón con el balcón y la cocina, derribando los marcos y las paredes existentes”.
El desafío fue crear un único ambiente con sala de estar, balcón gourmet, cocina y un salón, diseñando rincones específicos de lectura que combinaran entre sí, pero que gozaran de una estética particular.
“El revestimiento de madera del techo de las zonas comunes actúa como elemento decorativo mientras esconde las vigas que no se pudieron quitar”.
En cuanto a los revestimientos, se eligieron aquellos que aportasen un aspecto más natural y elegante al proyecto. Así, se utilizó piedra natural, porcelanato, pavimento vinílico, un tejido suave para el cabecero, piel y ebanistería.
Los colores elegidos para las áreas comunes siguen una línea de tonos tierra muy naturales, entre los que destacan el crema, el azul y el verde de las plantas.
En la zona de noche, cada habitación tiene un ambiente diferente. Para la suite principal se optó por una mezcla de colores nude, rojo cerrado y verde azulado.
“La casa goza de mucha luz natural y todos los baños tienen sus propias ventanas”.
En el baño de ella, blanco con vetas grises, tono amaderado y oro rosa en metales.
“En el baño de él, cementoso, negro, gris y tono amaderado oscuro con metales negros mate”.
En la habitación infantil, la decoración giró en torno a un tono de madera más claro, incluyendo blanco y otros colores primarios, con predominio del azul.
“En el dormitorio de los niños también fue necesario quitar la pared que daba lugar a dos habitaciones”.